Si quieres ver una exposición que te deje boquiabierto, esta es una de ellas.Supongo que estoy condicionado porque tuve a Daniel Canogar como maestro en el campus de Photoespaña...pero cuando entras a la sala tu percepción cambia, tus ojos se adaptan y descubres como con un material de deshecho puedes hacer algo tan increíble.
Cuando sales, solo tienes que escuchar y ver una entrevista que le han hecho, y en la que explica lo que has visto.
Es una pena que no la pueda recomendar porque ya se ha acabado, estaba hasta hoy en el Matadero de Madrid.Sin embardo creo que la obra de Daniel Canogar es recomendable para seguir, tanto por los conceptos que desarrolla, como por su gran capacidad de oratoria, a la hora de transmitir el mensaje.
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